La Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Almuñécar, lleva a la práctica una conservación eficiente y una tutela efectiva del Patrimonio Histórico de Almuñécar-La Herradura, desarrollando las actividades de limpieza, mantenimiento, conservación y protección de una forma continuada y constante a lo largo de todo el año, siguiendo un sistema de rotación constante para atender 58 Bienes Inmuebles Catalogados con los que cuenta el municipio.
El Concejal Delegado de Cultura del Ayuntamiento de Almuñécar-La Herradura, Alberto García Gilabert, nos indica que estas minuciosas tareas para el cuidado diario de los elementos patrimoniales, cuentan con la aprobación de la Junta de Andalucía, quién autorizó a través de la Delegación Territorial de Granada, el Plan de Mantenimiento Anual del Patrimonio Histórico de Almuñécar-La Herradura. Los trabajos los realizan operarios de la Casa de la Cultura, siguiendo las directrices de la arqueóloga municipal.
Según Gilabert «estas limpiezas permiten ver con mayor detalle elementos patrimoniales que oculta la vegetación espontánea, consiguiendo que luzcan merecidamente. Este el caso de un pavimento de mármol blanco, procedente de Macael, que se conserva en un gran edificio de época romana».
Se trata de un edificio de grandes dimensiones que contaba con una estancia principal revestida, en paredes y suelos, con grandes losas rectangulares de mármol, en cuyo centro se encuentran los restos de un elemento monumental, también revestido de mármol y relacionado con el agua, pues se conserva un canalillo en un extremo por el que se conducía el agua en un recorrido longitudinal por todo el espacio.
También es muy interesante la existencia de un canalón de opus signinum en posición vertical, adosado a la fachada exterior del edificio mencionado, que recogería el agua de lluvia del tejado y lo conducía a través de una canal para reutilizar almacenarla y utilizarla para riego de los jardines cercanos. Todos estos elementos nos trasladan a un entorno de lujo y esplendor, del que cada día vamos conociendo un poco más.
El concejal de Cultura señala que «en numerosos Bienes de Interés Cultural de Almuñécar, las tareas de mantenimiento y limpieza arqueológica nos descubren elementos tan interesantes como tuberías metálicas de época romana, con sellos ilegibles que indicarían quien era su propietario. Estas tuberías están elaboradas con plomo y llevan un revestimiento de cal que protege el agua de partículas nocivas para la salud. Habría que investigar si realmente se utilizaba la cal de manera intencionada para evitar que el agua erosionase el metal y se ingiriese el plomo que arrastraba, o fue el uso continuado de estas tuberías lo que acaba generando una capa intermedia de concreciones calcáreas que impedían el contacto directo entre el agua y el metal pesado.
Para Alberto García Gilabert «las limpiezas arqueológicas son muy necesarias y también muy interesantes, pues reportan conocimiento de restos arqueológicos que pueden pasar desapercibidos si no se cuidan y reciben un mantenimiento adecuado y continuo».