En este mes de agosto, informan desde la coalición de izquierdas, tras el frustrado anuncio de anexión por parte del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de los territorios palestinos que no están en su poder de manera oficial, el gobierno sionista ha intensificado los bombardeos sobre la Franja de Gaza, así como el corte de suministros, para tapar el fracaso de su proclamación y ahondar en su estrategia de acoso buscando la expulsión de la población palestina de su tierra.
Israel mantiene recluida en Gaza en torno a dos millones de personas, provocando que sea de las zonas con más densidad de población del planeta, con lo que eso comporta. A eso hay que sumarle que el gobierno israelí corta los suministros de agua y electricidad, además de bloquear la entrada de personas y necesidades básicas como medicamentos y aparatos médicos, entre otras cosas.
Es en Gaza donde se encuentra Khan Yunis, pueblo hermanado con Almuñécar, uno de los municipios que es blanco habitual de la aviación de guerra israelí cada vez que bombardean Gaza.
Según Jesús Ruiz, Coordinador Local de IU, “en 2018 el gobierno israelí, en uno de sus periódicos bombardeos sobre Gaza, asesinó a siete personas de nuestro pueblo hermano. Hoy, los bombardeos y el acoso por parte de Israel, lejos de remitir, han sido intensificados”.
Tal y como concreta UNRWA, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina, “en 2007 Israel impuso sobre Gaza un bloqueo ejercido por tierra, mar y aire que, además de ser contrario al Derecho Internacional, supone una violación masiva de los Derechos Humanos de la población. En la práctica, el bloqueo impide el intercambio de productos y servicios, al igual que la libertad para salir o entrar a Gaza”.
Ciertamente, afirman desde la organización de izquierdas, Israel lleva violando sistemáticamente las leyes internacionales desde su creación. “Son decenas las resoluciones de la ONU que el régimen sionista ha incumplido, entre las que hay que destacar la 194, que recoge el derecho al retorno de las personas palestinas refugiadas que fueron expulsadas”.
Igualmente, aseguran, vulneran el IV Convenio de Ginebra, relativo a la protección debida a las personas civiles en tiempo de guerra, tal y como denuncia la Asamblea General de las Naciones Unidas en otra resolución: “el Cuarto Convenio de Ginebra es aplicable al territorio palestino ocupado, incluida Jerusalén oriental, y que Israel contraviene varias de las disposiciones de ese Convenio”.
Asimismo, ajustándonos a la definición que se concreta en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, Israel estaría cometiendo Crímenes de Lesa Humanidad y Crímenes de Guerra.
Gabino Ovalle, responsable de Podemos Almuñécar, comenta que es de justicia que las administraciones públicas internacionales denuncien dichos crímenes. “Nuestro municipio no debe ser menos, máxime cuando uno de nuestros pueblos hermanos está sufriendo las consecuencias de los crímenes que el gobierno israelí comete desde hace décadas contra su población”.
Es por ello que, desde Izquierda Unida Podemos, piden al Pleno de Almuñécar que el Ayuntamiento condene los crímenes, traslade la denuncia a la embajada israelí e inste a la administración del Estado y autonómica a que haga lo mismo y, además, suspenda relaciones diplomáticas con el Estado sionista.